El viaje más grande realizado hasta ahora ha sido a Nueva York, para lo que nos informamos sobre lo que hacer durante una semana y aprovechar al máximo el tiempo.
Hay tanto que contar sobre Nueva York que lo iremos haciendo poco a poco en artículos independientes que iremos enlazando desde este artículo madre. Entre estas cosas que iremos contando están la de subir al edificio Top Of The Rock, visitar el Memorial del 11S, asistir a una misa góspel en Harlem, pasear por Central Park, ir a un partido de la NBA, y mucho, mucho, mucho más. ¿Empezamos?
Lo primero que vamos a hacer es compartir un mapa de Nueva York que nos hicimos con los puntos que consideramos de más interés para nosotros.
Lo segundo, un archivo pdf para descargar con un planning semanal distribuyendo las cosas a lo largo de una semana, que incluye un día en el que hicimos una excursión a Washington DC.
Y ahora que ya estamos organizados, vamos a ver un pequeño vídeo en time lapse con algunas de las calles de New York por las que pasamos, concretamente en la isla de Manhattan.
Empezamos ahora con un día a día de lo que hicimos, y según vayamos teniendo los artículos listos los iremos enlazando desde aquí. ¡Vamos allá!
Día 1: Viaje hacia Nueva York, hotel y vuelta de reconocimiento
El primer día salimos de Sevilla por la mañana a las 9:00 con dirección Madrid, donde cogeríamos otro avión a media mañana hacia Nueva York para llegar a las 15:00 hora de allí (en España son siempre 6 horas más tarde). Lo que fue el transporte y alojamiento nos lo gestionaron en Carrefour Viajes San Pablo de Sevilla.
El vuelo hacia Nueva York
Volamos con Iberia y quitando que el espacio para las piernas es bastante justito, el asiento venía con una tablet incorporada con películas, series y juegos, lo que ameniza bastante el trayecto.
Además, a las pocas horas de vuelo nos dieron comida (que se podría considerar el almuerzo) y más tarde una merienda que estaban bien para ser comida de vuelo.
El transfer desde el aeropuerto al hotel
¡Y llegamos a New York! Allí nos esperaba un transfer con la empresa Go Airlink que nos llevaría hasta el hotel. Varias cosas que comentar sobre el transfer: poco cuidado con las maletas, poca simpatía y atascazo enorme. Coincidimos con una de las «horas pico» de la entrada y salida de Nueva York y tardamos dos horas y media para un trayecto de menos de 30 km.
Llegada al hotel
Tras un transfer interminable llegamos al hotel OYO Times Square, situado en la 47th, a dos pasos de Times Square, una ubicación perfecta y estratégica para acceder a todo, algunas cosas a pie y otras cogiendo el metro.
En el hotel teníamos una habitación Queen superior, que aunque el nombre suene a mucho era de lo más básico y con una medida de 11 metros cuadrados (las que no eran «superior» medían 8 metros cuadrados…).
A pesar del tamaño de la habitación, el hotel en general está bien y su buena ubicación compensa un poco lo estrecho de la habitación. Además, al llegar nos dijeron que tenían una sala con ordenadores a disposición de los clientes, que daban botellas de agua a quien la solicitase y que por la mañana de 7:00 a 9:00 había una zona con café o té gratis para los clientes.
Esto último no lo valoramos en un principio pero cuando salimos a la calle y empezamos a ver los precios de las cosas vimos que es un punto fuerte del hotel.
Conociendo Times Square
Salimos a la calle para empezar a conocer los alrededores y dejar hechas algunas cosas como por ejemplo comprar la tarjeta para el metro, ver si había comercios cercanos, etc.
Lo primero en ver fue Times Square. Es enorme, llena de gente y de luces, con anuncios por todos sitios, carritos de comida rápida, tiendas y personas disfrazadas de superhéroes y personajes famosos de Disney.
En la vuelta de reconocimiento vimos que los desayunos en el entorno costaban sobre los 20$ por persona, una auténtica barbaridad, sobre todo porque no eran nada del otro mundo.
Por suerte, en una de las tiendas conocidas como «delis» encontramos que vendían bagels con mantequilla y mermelada por 2,50$ (más impuestos) cada uno, que nos darían junto al café gratis del hotel para desayunar el primer día y no caer en shock al soltar 40$ por un desayuno de lo más básico del mundo.
Por cierto, ojo a los precios, normalmente los impuestos los cobran al final y a no ser que sea un sitio de ticket, suelen tender al redondeo al alza en algunos puestos de la calle.
El metro en Nueva York, mejor con MetroCard
Una vez desembarcas en Nueva York, lo primero que tienes que hacer para moverte es comprarte la tarjeta MetroCard, ya que vas a ahorrar mucho tiempo y dinero en transporte al tener esta tarjeta.
Cada viaje cuesta 2,75$, por lo que, si vas a patear la ciudad cada día y a moverte entre distintos barrios, lo más rápido y barato es el uso de esta tarjeta para metro y autobús.
Nosotros la compramos la misma noche que llegamos en una boca de metro. Ten en cuenta que si la usas el día de compra y son las 23:30, habrás perdido ese día completo, e igual te conviene coger para esa noche un billete simple.
Hay varias opciones, nosotros cogimos la de 7 días que salía por 33$, que aunque en un principio parezca cara… en cuanto empiezas a coger el metro te das cuenta que la vas a amortizar de sobra.
Entradas para sitios de interés en Nueva York con City Pass C3
Si te pones a buscar en internet verás que hay muchas tarjetas que agrupan visitas a los diferentes monumentos y museos de Nueva York con unos descuentos muy significativos.
Entre todas las opciones disponibles nosotros escogimos la City Pass C3, que da opción a ver 3 lugares de entre 11 disponibles. Hay otra de 6 lugares pero en una semana tampoco queríamos reventar.
En nuestro caso los lugares de interés que escogimos fueron el Memorial 11S, la subida al edificio Top of the Rock (Rockefeller Center) y la visita al famoso museo MoMA (Museum of Modern Art).
La City Pass C3, además de para ahorrar, sirve para saltarse muchas de las colas pero tuvimos infinita suerte y no tuvimos que esperar absolutamente nada en ninguno de los lugares que visitamos con la City Pass C3.
En cuanto al coste, son 79,50€ por persona y en el caso de los 3 sitios que elegimos representó un ahorro de 14,87€ sobre la tarifa oficial. Es decir, que entre los dos nos ahorramos 30$ que pudimos destinar a otras cosas.
Bryant Park y su pista de patinaje
Callejeando un poco llegamos a Bryant Park, donde en las fechas cercanas a la Navidad ponen una pista de patinaje sobre hielo rodeada de tiendecitas.
También fuimos reconociendo calles, pasando por algunos edificios conocidos como el Empire State que vimos desde abajo hacia arriba, que aconsejamos verlo mejor de lejos porque desde abajo no se ve nada de nada.
Cenar hamburguesas en Shake Shack
Este sitio, Shake Shack, es uno de los que más blogs de viajes recomiendan por sus hamburguesas, y vale, están buenas, pero nos habíamos creado una expectativa demasiado alta y nos fuimos ligeramente descontentos. Allí pedimos dos hamburgesas, unas patatas y un batido grande para compartir. Todo por 26$.
Habíamos leído que, por los altos precios de las bebidas, en EEUU es muy común que la gente en los bares pida agua del grifo («tap water» que se dice). Esta primera comida en New York la hicimos con el batido como bebida pero al lado de la máquina del kepchup y mostaza vimos un grifo de agua con vasos de plástico donde la gente iba a echarse al gusto. Hablamos más sobre este sitio y otros en el post sobre dónde comer en Nueva York.
Y como nos quedaban 7 días por delante, tras la cena nos fuimos para el hotel para empezar a deshacer maletas y descansar un poco.
Día 2: Excursión Contrastes, Puente de Brooklyn y Memorial 11S
Comenzamos el día tempranito esperando a un autobús de 50 plazas que nos llevaría durante la mañana a varios lugares de la ciudad de Nueva York que son significativos para entender la idiosincrasia de esta ciudad. Es lo que se conoce como la excursión Contrastes de Nueva York.
Como es bastante importante a la hora de entender Nueva York le hemos dedicado un artículo completo que puedes ver en este enlace. En este tour conocimos los barrios de Harlem, Queens, Bronx y muchos más lugares y curiosidades sobre la ciudad de los rascacielos y sus alrededores.
Una parada en la Pastelería la Gran Uruguaya, en Jackson Heighs
Durante la excursión Contrastes hicimos una parada en una pastelería en la que tomamos un pequeño aperitivo. Su nombre: La Gran Uruguaya Bakery.
Está en el 85 de la 37th, en el barrio de Jackson Heights. Hablamos más sobre este lugar en el post sobre los lugares recomendados para comer en Nueva York.
El puente de Brooklyn y el puente de Manhattan
Al finalizar el tour daban la opción de hacer una parada para dejar viajeros cerca del puente de Brooklyn, con idea de ir a la zona conocida como «Dumbo» y tomarnos por allí la famosa foto con el puente de Manhattan entre dos edificios y con el Empire State en medio.
Te damos todas las claves para hacerte la famosa foto en este post de consejos sobre cómo hacerte la foto perfecta en Nueva York con el Puente de Manhattan.
Visitar el Memorial 11S
El Memorial 11S es uno de los lugares de reciente creación más famosos de Nueva York. En pocas palabras, es un museo sobre todo lo que significaron los atentados del 11 de septiembre de 2001 para Nueva York, para EEUU y para el mundo.
En el exterior lo primero que se ve son dos grandes cascadas cuadradas que ocupan el espacio de lo que en su día fueron las torres gemelas. A uno de sus lados, el nuevo World Trade Center y a otro la entrada al museo.
Es un lugar frío, que no te deja indiferente, en el que se recopila muchísimo material de aquellos días, documentos, vídeos, testimonios… hay mucha crudeza en todo. Está planteado de forma cronológica, de modo que comienzas haciendo un repaso por las horas previas y vas avanzando por todo lo que sucedió, sus consecuencias, y cómo cambió el mundo.
Hemos hecho un pequeño vídeo recopilatorio de fotografías que tomamos en el interior del Memorial 11S, al menos para hacerse una idea general de lo que se puede encontrar allí.
Cenar dumplings en China Town
Paseando por China Town fuimos a un lugar que habíamos visto en varios blogs que destacaban por sus dumplings y por su cocinera, una señora asiática poco amable que te grita cuando te atiende. El sitio se llama Fried Dumpling y está en la calle Mosco.
Nos pedimos 5 dumplings (que nos puso 7) por 1,50$, 4 pork bun (que nos puso 6) por 1,50$ y una coca cola cero de 2$. Todo esto entre gritos diciéndonos el precio cada vez que pedíamos algo.
Fue rápido y las cosas estaban buenas, aunque la señora prácticamente nos echó porque iba a cerrar. Una curiosa historia que te contaremos al completo en el post sobre 10 sitios donde comer en Nueva York.
Tras la cena, paramos en una cafetería también en China Town en la que nos pedimos como postre un pastel de crema y coco con un café, todo por 3’80$.
Día 3: Excursión a Washington DC y paseo por NYC
Para nuestro tercer día en EEUU teníamos contratada una excursión a Washington DC desde Nueva York, que suele rondar sobre algo más de 100€ y requiere un día completo, ya que sales muy temprano por la mañana y vuelves de noche.
Como sobre esta excursión hay mucho que contar, hemos hecho un artículo sobre todo lo que debes saber sobre ella y qué es lo que se hace para pasar un día completo de turismo en la capital de EEUU. Te lo contamos en este enlace: Excursión de un día a Washington DC (Fotos y vídeo).
Panorámica nocturna de Manhattan
Al finalizar la excursión de un día a Washington DC el guía nos paró en la otra orilla de Manhattan para que pudiésemos tener una gran panorámica nocturna de todos los rascacielos.
Nos puso música de Sinatra de fondo y nos dio tiempo para sacarnos unas fotos. Un buen detalle para finalizar una buena excursión.
Supermercados Walgreens: un gran descubrimiento
Volvíamos agotados para el hotel pero antes teníamos que ver algo para cenar así que hicimos una parada en un supermercado de la cadena Walgreens, donde compramos algunas cosillas para cenar en la habitación y tener algo para picotear en los momentos de hambre.
Fue un gran descubrimiento este sitio, ya que tienen comida preparada a buen precio y que además viene bien de cantidad y con buena pinta. Al que fuimos nosotros está muy cerca de Times Square así que lo recomendamos si os alojáis cerquita ya que es un salvavidas.
Paseo nocturno por New York
Era de noche pero no era muy tarde así que para aprovechar un poco el viaje a la Gran Manzana decidimos andar un poco y ver la ciudad de noche, pasando por algunos de los sitios más emblemáticos, como el edificio Dakota, donde vivía John Lenon (que como las fotos de noche no salían bien, ponemos una de día).
Edificio Chrysler
Uno de estos sitios fue el Edificio Chrysler, que a principios del siglo XX fue el rascacielos más alto del mundo durante 11 meses, hasta que el Empire State le quitó el título. Eso sí, es el más alto hecho de ladrillos y exteriormente es de los más representativos de Nueva York.
Grand Central Station
Seguimos el paseo hasta la Estación Central, en la que entramos y paseamos un poco viendo los escenarios de cientos de peliculas que hemos visto toda la vida sobre esta ciudad.
Tiene mucho ajetreo a cualquier hora, hay numerosos sitios donde comer algo rápido y además tiene un sitio curioso de interés: la galería de los susurros.
Se trata de una bóveda en la que si te pones en un extremo y otra persona en otro, podéis hablar a través de la bóveda. Es difícil de encontrar pero cuando veas a gente hablándole a una esquina sabrás que estás en el sitio correcto.
Día 4: MOMA y Top Of The Rock
Nuestro cuarto día en Nueva York se compuso de dos visitas incluidas dentro de lo que pagamos inicialmente por la tarjeta Citypass, Una de las visitas fue al museo MOMA (Museum of Modern Art) y otra al rascacielos Top Of The Rock, también conocido como Rockefeller Center.
Como hacía buen día también nos dimos bastantes paseítos para vivir el ajetreo de la ciudad, al fin y al cabo es lo que hace que conozcas de verdad Nueva York.
Visitar el MOMA New York
En cuanto al MOMA, todo lo que podamos escribir ya está escrito, pero sí podemos dejar un video de lo que vimos y decir nuestras sensaciones. Empecemos por el vídeo:
Al principio te sientes abrumado porque hay muchas cosas que quieres ver, obras que has visto en libros, documentales, publicidad, etc. Y empiezas a verlo, sí, pero entre medio tienes que ver muchas otras cosas que no dejan de ser para personas más iniciadas en arte. Cosas a veces muy extrañas.
Es un museo enorme, terminas agotado de ver una galería tras otra, una planta tras otra, así que nos planteamos ver lo que queríamos ver, y luego disfrutar sin prisa ni presión del resto de las exposiciones. Recomendamos ir temprano, cuanto más avanza la mañana… más se llena.
Esculturas Hope & Love
Pateando calles neoyorquinas fuimos buscando las famosas esculturas de Hope & Love, encontrando solamente la de Hope ya que la de Love estaban restaurándola en el momento de nuestra visita.
Realmente no es más que eso, un punto de interés en el que echarse unas fotos, pero dentro del paseo por la ciudad es interesante dejarlo visto.
Tienda Apple
Seguimos pateando y llegamos sin pretenderlo a la entrada de la tienda Apple. Ya que estábamos pues tuvimos que bajar, habíamos leído que merecía mucho la pena y que era una visita obligada.
A ver, si eres fan de Apple y quieres comprar algo… este es tu sitio, ya que aquí lo vas a encontrar. Es enorme y dentro hay varios cientos de personas probando y viendo las cosas.
También están los que, como nosotros, bajan (porque es subterránea) y dan una vuelta por conocerla y marcarla como vista en las «cosas que hacer en Nueva York si cogen de camino» (que es una lista paralela que recomendamos tener preparada).
Almorzando pizza en 2Bros
Aprovechamos el cruzarnos con un 2Bros Pizza para almorzar por buen precio, cogiendo dos ofertas de dos porciones de pizza a 2,99$ y añadiendo una porción de pollo crujiente y otra de queso ricotta.
Recomendamos y mucho la pizza de pollo crujiente, está riquísima. Puedes ver las fotos en el post de los sitios para comer en Nueva York.
Ver la Puesta de sol en el Top Of The Rock
Y por fin llegó el momento más esperado del día, el de la visita al Top Of The Rock, desde donde veríamos la puesta de sol sobre la Gran Manzana. Compartimos por aquí un vídeo de esta gran experiencia:
Al igual que nosotros, esta experiencia la viven muchísimas personas cada día por lo que hay que reservar el día y la hora con antelación y elegir bien cuándo subir.
La hora preferida de todo el mundo para visitar el Rockefeller Center es durante la puesta de sol y por supuesto cuesta más caro, pero si eliges la hora previa, aunque tengas que esperar un poco, te sale mejor de precio y además disfrutas más tiempo de todo. Así lo hicimos nosotros y mereció la pena, pudimos hacer la visita con más tranquilidad y tampoco se nos hizo larga la espera.
Primero hay que pasar un filtro de seguridad, luego pasas por una especie de photocall (buen momento para ir al servicio) y desde ahí coges el ascensor hasta la planta 67. El resto, que no es mucho, ya se hace a pie y se obtienen unas panorámicas de la ciudad que son espectaculares, sobre todo cuando se ha ido al 99% el sol. Aquí un ejemplo:
Día 5: Misa Góspel, Staten Island, Greenwich Village, Soho y China Town
Llegó el domingo, nuestro quinto día en Nueva York. Fue bastante movidito, tanto que hicimos 40.000 pasos según nos dijo Google Fit.
Fuimos a una misa Góspel en Harlem, cogimos el ferry de Staten Island y paseamos mucho por las calles de Greenwich Village, el Soho neoyorquino, Little Italy y China Town. Un no parar que contaremos en las siguientes líneas.
Misa Góspel en Harlem
De lo mejorcito que hicimos en Nueva York. Asistir a una misa góspel en Harlem es algo que recomendamos totalmente. Aunque hay muchas opciones, nosotros fuimos a la Bethel Gospel Assembly y salimos super contentos.
Como la experiencia merece un post aparte, te invitamos a verlo con fotos y vídeos, para que te puedas hacer una idea de lo que vivimos allí. (Ver artículo sobre asistir a una Misa Góspel en Harlem)
Aunque te lo contamos en el artículo, te adelantamos que nos hicieron sentir como uno más de la comunidad, fue todo espectacular. Dos horas y media de auténtico disfrute.
Brunch en Harlem Shake
Tras la misa góspel emprendimos nuestro camino hacia Harlem Shake, un pequeño y encantador bar que sirve unas hamburguesas espectaculares.
La decoración del local, inclusive la de los baños, es muy original. Además, el personal es muy amigable y atento así que mejor que mejor.
En Harlem Shake no tienen servicio en mesa por lo que no tendrás que dejar propina de forma obligatoria, que ya es algo. Nosotros pedimos para beber una mimosa y una soda de cereza, unas patatas con queso y un par de hamburguesas. Todo por 35,92$.
Te contamos más detalles sobre Harlem Shake en el post sobre los lugares que recomendamos para comer en Nueva York.
Alrededores de Wall Street
Desde Harlem cogimos la línea 3 del metro hasta cerca de la terminal de Ferry de White Hall, en la que cogeríamos un barco que lleva a Staten Island gratis y que durante el camino ofrece una vista no muy lejana de la Estatua de la Libertad.
El metro nos dejó cerca de Wall Street y vimos a la multitud tocándole los huevetes al famoso toro. Es imposible echarse una foto de frente o por detrás del toro, pero si eres hábil te puedes poner por el lado y en el cambio de persona para la foto de los huevetes los tocas y te vas. Así de sencillo.
El ferry de Staten Island
Nosotros cogimos el ferry de las 15:00 y allí había muchísima gente para cogerlo. No lo dejamos para más tarde por varias razones, principalmente porque hacía mucho frío y como tema secundario porque no íbamos a ver bien la estatua.
En el momento de llegar el ferry es tonto el último para dentro, la gente se arremolina en las barandillas para no perderse nada pero hace tanto frío que en un momento toda la gente está dentro y puedes campar a tus anchas por las mejores zonas de visión panorámica del ferry.
Es grandecito así que no hay que preocuparse por coger sitio porque en cuanto se organiza la gente hay de sobra. Además de ver la Estatua de la Libertad a lo lejos, también se obtiene una bonita panorámica de Manhattan desde el ferry y a esa hora es perfecta porque está cayendo la luz.
Así fue nuestra experiencia de ida y vuelta (porque nos dio tiempo a salir corriendo y coger el que salía de vuelta) en el ferry de Staten Island:
Greenwich, el barrio rico
Desde la terminal del ferry nos fuimos en metro hacia Greenwich, uno de los barrios acomodados de Nueva York. Aquello era otro ambiente, casitas bajas con gente pudiente paseando tranquilamente al perro, tiendas de moda menos accesible, decoración, etc. En definitiva, un barrio rico.
Fue un paseo muy agradable lejos de las prisas y el amasijo de turistas que tienen las calles principales de Manhattan, un poco de desconexión de ese jaleo diario.
La Casa de Carrie de Sexo en Nueva York
Durante nuestro paseo pasamos por la que fue la casa de Carrie en la serie «Sexo en Nueva York», conocida en inglés como «Sex in the City».
Pensábamos que íbamos a ser los únicos frikazos allí, pero no, había más gente esperando su turno para hacerse la foto en la puerta del personaje que interpretaba Sarah Jessica Parker en la serie.
La Casa de Friends
También pasamos por la esquina opuesta de la que en teoría era la casa de la serie «Friends», que sí que estaba más concurrida que la de Carrie.
La de Carrie al estar a pie de calle daba más juego, con la de Friends lo único que se podía hacer era tomar una foto hacia las ventanas que salían en la serie, aunque luego el resto se hacía en un plató.
Paseo por el Soho
Continuamos el paseo por el Soho de Nueva York, repleto de comercios y casas de gente de bien. Allí aprovechamos para hacer unas pequeñas compras en algunas tiendas y disfrutamos del paseo por esa zona tan conocida de la ciudad.
Atravesando Little Italy
Nos dirigimos hacia Little Italy a pesar de que nos dijeron que actualmente solo es una calle rodeada de China Town. Nada de lo que esperábamos encontrar porque el cine te vende que aquello es como las calles más características de Roma, de Venecia o de Florencia.
Pero nada, cuatro restaurantes y poco más. Allí hicimos algunas compras de souvenirs, que eso sí, el precio es mucho mejor en esta zona que cerca de Times Square, y son los mismos souvenirs.
Cenar en China Town
A continuación de Little Italy nos adentramos un poco en China Town viendo miles de bazares y restaurantes chinos, unos tras otros, y sin mucho más encanto que las letras chinas en los rótulos. No es como en Londres por ejemplo que le ponen un poco más de decoración de cara al turismo.
Para cenar volvimos de nuevo a Fried Dumpling, el lugar de la señora china que chilla a los clientes. En esta segunda visita nos tomamos 2 sopas y 2 platos de dumplings con una lata coca cola, todo por 8$. Lo contamos con más detalle y ponemos fotos en el post sobre dónde comer en Nueva York que ya hemos mencionado anteriormente.
Día 6: Central Park, Museo de Historia Natural y partido de la NBA
El sexto día en Nueva York lo empleamos en visitar Central Park, ir al Museo de Historia Natural y por último completar el día con nuestra primera experiencia en un partido de la NBA. Fue un día tranquilo pero sin parar, los días previos iban pesando pero no se podía dejar de conocer Nueva York, es lo que tiene esta ciudad.
Paseo por Central Park
La lluvia mañanera no fue impedimento para que disfrutásemos de una mañana de paseo por Central Park. Estaba chispeando pero con un impermeable se solucionaba el asunto.
Sin pretender verlo todo, fuimos dando una vueltecita y pasamos por varios de los sitios más destacados del parque. Vimos desde fuera el famoso Zoo, varios de sus lagos, el Belvedere Castle, la estatua de Alicia en el País de las Maravillas, el Memorial de John Lennon llamado «Strawberry Fields», y por supuesto sus conocidos puentes. En este blog llamado Los Apuntes del Viajero se pueden conocer todos los detalles para que la visita a Central Park sea de lo más productiva.
Hemos hecho un vídeo recopilatorio de nuestro paseo por Central Park, aquí se puede ver un poco de lo que pateamos por allí:
Museo de Historia Natural
Muy cerca de Central Park se encuentra el Museo de Historia Natural de Nueva York, famoso por su contenido y también por ser el escenario de la película «Noche en el Museo».
La entrada es mediante el sistema «Pay as you wish», es decir, tú pagas el importe de la entrada que creas que debes pagar. Allí en la cola ves de todo, desde gente que paga dos dólares hasta gente que paga 30. Al fin y al cabo unos compensan a otros y el museo mantiene una recaudación constante. Ya depende del tiempo que tengas pensado estar y de lo que quieras ver.
Para ver el museo en condiciones se necesita prácticamente todo el día, pero claro, te quitas de ver otras cosas de la ciudad. Nosotros fuimos directamente a lo que más nos interesaba, los esqueletos de dinosaurios (espectaculares) y la parte más conocida de la película de Noche en el Museo. En este vídeo resumimos nuestras andanzas por el Museo de Historia Natural de Nueva York:
Una vez visto eso, seguimos visitando sala tras sala para intentar al menos tener una noción general de todo lo que allí se puede ver. En su web se puede ver perfectamente un resumen de todas las salas y su contenido, que es bueno darle un vistazo previo antes de ir para afinar al máximo la visita.
Perritos calientes en Gray’s Papaya
Un gran descubrimiento a la hora de comer perritos calientes en Nueva York. Este sitio tiene una buena oferta que consiste en 2 perritos bastante buenos con su guarnición por encima, acompañados de una bebida que es un zumo natural. Todo por 6,45$.
Contamos nuestra experiencia con más detalle y fotos en el artículo de lugares recomendados para comer en Nueva York. Por cierto, nos tomamos un zumo de papaya y otro de piña colada.
Experiencia NBA: New York Knicks vs Cleveland Cavaliers
A las 18:00 llegamos al Madison Square Garden en donde disfrutaríamos de nuestra primera experiencia en un partido de la NBA.
El partido enfrentaba a los New York Knicks y a los Cleveland Cavaliers y la verdad es que fue de los peores partidos de la historia de la NBA, pero haber estado ahí mereció la pena.
Y la mereció por el ambiente, el entorno, el haber formado parte de la grada de uno de los partidos de la mejor liga de baloncesto del mundo. Eso no tiene precio. O sí lo tiene, pero te lo contamos al completo en este artículo que hemos titulado «Ir a la NBA en Nueva York» y que puedes ver haciendo click sobre el título.
En el artículo explicamos el proceso de comprar las entradas a través de internet, cómo llegar al Madison Square Garden, las compras que puedes hacer dentro del estadio, algunos vídeos de varios momentos y muchas más cositas que pueden resultar de utilidad o de interés para ir a la NBA en Nueva York.
Cena para llevar de Kwik Meal Cart
Como cuando salimos del partido estaba lloviendo a mares, nos apresuramos a llegar a la zona del hotel y allí descubrimos un carrito de comida para llevar llamado Kwik Meal Cart, en el que pedimos un par de cosillas.
Como decimos en el artículo sobre comer en Nueva York, no hay que dejarse engañar porque sea un carrito de comida, está todo muy bien y es perfecto para esos días en los que no tienes ganas de calle y quieres llegar pronto al hotel.
Día 7: Roosevelt Island, Hell’s Kitchen y teatro en Broadway
Iniciamos el séptimo día en la Gran Manzana tomando un metro para conocer Roosevelt Island y a continuación pasear por Hell´s Kitchen, barrio famoso entre otras cosas por ser la casa del superhéroe Daredevil.
Pusimos el broche al día viviendo en primera persona una sesión de teatro en Broadway (o cerquita), con una obra precisamente interpretada por el actor que da vida a Daredevil en la serie de Netflix. Luego lo contamos con más detalle, ¡empezamos el séptimo día!
Paseo en Tramway hacia Roosevelt Island
A los pies del Puente Ed Koch Queensboro Bridge, en el Tramway Plaza ubicado en la calle 60th, tomamos otro de los medios de transporte que puedes usar con la MetroCard. Se trata del Tramway.
Si has visto Spiderman lo conoces seguro. Tienes que coger este teleférico que en un pispás te lleva a Roosevelt Island. Por cierto, si tras dar la vueltecita por dicha isla te da pereza esperar al siguiente teleférico, que sepas que está también conectado por metro.
En este vídeo se puede ver el trayecto en el Tramway hasta la isla:
Visita fugaz al puente de Brooklyn
Sobre la marcha decidimos hacer una nueva visita al puente de Brooklyn y cogimos la línea F del metro hacia allí desde Roosevelt Island.
Aprovechamos el buen día que hacía para tomarnos unas fotos sobre este puente tan emblemático, que para variar estaba a rebosar de gente, y seguimos nuestro día turístico.
Almuerzo en 2Bros en Chelsea
Paramos a comer en el 2Bros de Chelsea, nuestra segunda experiencia en este local de pizzas rápidas. Allí pedimos 2 ofertas de estas de 2’99$ que incluyen cada una 2 porciones de margarita y una lata de refresco, a lo que sumamos una porción más de peperoni 2$.
Por supuesto que lo contamos y recomendamos en el post de los lugares para comer en Nueva York.
Café a buen precio en New York
Tras el almuerzo, descubrimos un puesto de café en la 8ª con la 39st, que cierto es que estaba igual de malo que el resto de cafés de Nueva York, pero era mucho más barato y la mujer que atiende era muy simpática.
Paseando por Hell’s kitchen
Luego nos fuimos adentrando casi sin darnos cuenta en el barrio de Hell´s Kitchen, que además de ser el barrio de Dare Devil, es uno de estos barrios algo olvidados que se ponen de moda y se revalorizan a tope.
En las calles de Hell’s Kitchen hay muchos comercios, cafeterías, esquinas que seguro que has visto en más de una película o serie con Nueva York como escenario… En definitiva, un lugar agradable por el que dar un paseo y tomar unas fotos.
Paseo por el Highline
Siguiendo con el paseo en busca del Highline, que es un jardín o parque elevado por el que recorrer una buena parte de la ciudad desde una vista más alta por encima del tráfico y el ajetreo, llegamos a un gran centro comercial.
Este centro es el más moderno de Nueva York y su nombre es Neiman Marcus Hudson Yards. En su interior, tiendas de lujo y de alta gama, con precios poco accesibles para el ciudadano medio.
Una vez visto, subimos al Highline y nos dimos un breve paseo por él, principalmente porque hacía frío y el tiempo parecía que iba a romper a llover en cualquier instante.
La particularidad del Highline es que cuando cruzas con una gran avenida obtienes unas vistas que sorprenden por su profundidad, este paseo sirve para magnificar un poco más Nueva York y para ver el «hormigueo» constante y el movimiento que tiene.
Flatiron, de los primeros rascacielos de NYC
Bajamos del Highline para dirigirnos dando un paseo por la 23st hacia uno de los edificios más conocidos de la ciudad, el Flatiron. En este trayecto nos sorprendió que cuando ves, por ejemplo, una lavandería, luego ves 7 más seguidas. Si ves un kebab, ves un montón seguidos. Es como si se organizaran por mismas profesiones o tipos de tienda, como antiguamente.
Llegamos al edificio y desde el frente intentamos hacer algunas fotos para inmortalizar el momento. Además, justo desde ahí que hay un reloj muy pintoresco, se puede visitar también la tienda Lego.
No pudimos evitar entrar y allí sí que pasamos un buen rato viendo cosas y jugando a juegos para niños que realmente están hechos para enganchar a niños y adultos. En esta foto se ven todas las escenas típicas de la Gran Manzana, ¡hasta los superhéroes!
Los Roof Top de Nueva York
Habíamos leído que por las tardes algo muy típico es irte a un Roof Top a tomar copas. Tras mirar por internet cuál nos podría cuadrar mejor con nuestro planteamiento turístico nos decidimos por el 230 fifth Roof Top, que se encuentra cerca del Flatiron.
Fuimos para aprovechar la «Happy hour», que si tenemos en cuenta que en ese intervalo de tiempo la cerveza sale a 7$, miedo da el precio fuera de la hora de los tiesos (como nosotros).
Eso sí, nos tomamos nuestra cerveza en la azotea de un edificio alto típico de Manhattan viendo anochecer (pasando algo de frío) con unas vistas espectaculares. Merece la pena la experiencia.
Ir al teatro en Broadway
Casi sin pretenderlo pudimos vivir en primera persona una obra de teatro en Broadway protagonizada por Tom Hiddleston (el actor que hace de Loki en Los Vengadores), Charlie Cox (el actor que hace de Matt Murdock en Daredevil) y Zawe Ashton (que hace de Imani en Gone Too Far). ¡Cartelazo!
La obra fue Betrayal, de Harold Pinter, y el lugar el Bernard B. Jacobs Theatre, ubicado en el 242 de la calle 45th, a pocos pasos de Broadway. Un lugar con casi 100 años de espectáculos entre sus muros.
Las entradas nos salieron cada una por 49$ más gastos de gestión. En este vídeo se puede ver a los actores que nos los encontramos por casualidad firmando autógrafos cuando volvíamos de la excursión de un día en Washington.
Cenar hamburguesas en Black Iron Burger
Recomendados por un guía, elegimos cenar en Black Iron Burger, un local muy auténtico en el que nos tomamos unas hamburguesas que estaban bien, aunque tela el precio.
Nos pedimos una hamburguesa llamada Bib Chicken Burger y otra The Master Piece, acompañadas de batatas fritas (sweet potatoes fried) y dos refrescos con refill.
Hemos puesto las fotos y contado todo al detalle con sus precios en el artículo sobre comer en Nueva York. ¡No te lo pierdas!
Día 8: Central Park y compras de última hora
Nuestro último día en Nueva York lo dedicamos a hacer varias compras temprano por la mañana y a dar un paseo por las calles de Manhattan. Sinceramente, íbamos a echar de menos el ajetreo de Nueva York y queríamos apurar el tiempo.
Biblioteca Pública de Nueva York
Uno de los lugares que nos faltó por ver hasta ese día fue la Biblioteca Pública de Nueva York. Entramos y la señora que había recibiendo a los visitantes nos indicó muy amablemente todo lo imprescindible para ver en una visita exprés a la Biblioteca.
Es un lugar espectacular. Para ir con más tiempo y perderse por sus plantas, salas, rincones, etc. Un momento de paz para desconectar en mitad del ajetreo de Nueva York. Además, cuando fuimos nosotros no había demasiada gente y en algunas salas se podía estar prácticamente sin nadie.
Comer perritos en Nathan’s
Como almuerzo improvisado paramos en un puesto callejero de la franquicia Nathan´s, un lugar recomendado en todas las guías pero que no sabemos por qué. Si miras el detalle en el post sobre los lugares donde comer en Nueva York entenderás por qué decimos esto.
Aquí almorzamos dos perritos con patatas y una Coca Cola Zero de medio litro para compartir. El precio, 21$, un timo.
Descubriendo más de Central Park
Como teníamos tiempo después de almorzar y estábamos muy cerca de Central Park nos fuimos a dar un último paseo por sus caminos.
Es un parque taaaaan grande, que prácticamente no hemos visto casi nada, aun habiendo visto mucho. Pero su atractivo es ese, perderte por él sin rumbo, viendo lo que vaya saliendo y dando con escenas tan características de Central Park en otoño como esta.
La merienda en Five Guys
Aquí paramos a merendar y nos zampamos por 5’70$ un batido de mantequilla de cacahuete, bacon y nata. Espectacular y grande, como para dos personas y media.
Nos quedamos con ganas de probar sus hamburguesas pero eso ya será en otro viaje que algún día esperamos hacer. Cuando lo hagamos, lo contaremos en el artículo sobre los lugares donde comer en Nueva York.
De vuelta para España
Llegó el momento de volver a España. En la puerta del hotel nos esperaba el transfer de la empresa Go Airlink que nos llevaría al aeropuerto JFK. Habíamos quedado con muchas horas de antelación por varias razones: atascos, filtros de seguridad, posibles retrasos, etc.
El conductor era como Fernando Alonso pero en dos metros, con 100 kg más y con la vida de 10 personas en sus manos. Una gran experiencia la de llegar ilesos al aeropuerto.
Al llegar al aeropuerto tardamos una hora y media en atravesar todos los filtros de seguridad. Por suerte no hubo incidencias y tuvimos tiempo de sobra para esperar al vuelo. Aviso: el café más barato en el aeropuerto de Nueva York cuesta 4$. ¡Cómo dolió eso!
Y el resto pues ya fue subirnos al avión de vuelta a Madrid, ver películas, matar el tiempo, y luego volver hasta Sevilla con un poco de jet lag, y sin relajarse mucho porque dos días después teníamos un concierto de Raphael reservado desde hacía 11 meses, pero esa es otra historia.
Si has llegado hasta aquí, te damos las gracias por seguir al detalle nuestra semana en Nueva York, te agradeceríamos un comentario diciéndonos qué te ha parecido, si vas a ir a Nueva York y te sirven los consejos, si ya has estado y crees que nos falta algo que ver para un próximo viaje, etc. O simplemente saludar 😉
¡Un saludo y gracias por leernos!
Hola! Gracias por hacer referencia a nuestro post de Central Park 🙂 Cuántos recuerdos de Nueva York viendo este artículo… lo echo de menos! jaja