Experiencias: Visitar Bodegas Barbadillo en Sanlúcar de Barrameda

Barbadillo, visita a la bodega en Sanlúcar

Por motivos de trabajo tuve la oportunidad de formar parte con mis compis de 360º M&C de un grupo que iba a visitar Bodegas Barbadillo en Sanlúcar de Barrameda, Cádiz. Esta localidad está situada en un lugar privilegiado como es la desembocadura del río Guadalquivir frente al Coto de Doñana.

Visitar Bodegas Barbadillo es un plan ideal y complementario si se está por la zona, pudiendo también hacer otras actividades como ir a la playa, saborear la gastronomía de la zona, etc. Sin duda un buen plan para el apartado de experiencias del blog.

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Por qué visitar una bodega

Me gusta el vino y me gusta visitar bodegas. Prueba de ello es que tengo un blog de recomendación de vinos en el que cato a mi manera y pongo puntuación a lo que he tomado. Y también que a día de hoy he pasado por varias bodegas grandes como Osborne en el Puerto de Santa María y en Jerez por González Byass, Estévez y Lustau.

También he visitado otras más pequeñas y familiares que recomiendo conocer si vas a visitar Estepa, como son Bodegas Machuca, con más de 150 años de historia, o Bodegas Blanco, de fundación más reciente.

Visitar Bodegas Barbadillo

Pero hoy de lo que voy a hablar es de visitar Bodegas Barbadillo y del día tan bueno que echamos en Sanlúcar entre la visita a varias de las bodegas de esta conocida firma y el almuerzo tan bueno del que disfrutamos.

Visitar Barbadillo y sus bodegas

La importancia de la ubicación de la bodega

La situación tan estratégica que tiene Bodegas Barbadillo respecto a los vientos hace que sus vinos tengan unas condiciones excepcionales, razón por la que la manzanilla de Sanlúcar de Barrameda es famosa mundialmente.

También influye y mucho en estos vinos la uva palomino, cuyas vides reposan ancladas con sus raíces sobre una tierra albariza muy clara compuesta mayormente por restos fósiles marinos del oligoceno.

Bodegas Barbadillo se ubica en Sanlúcar

Este tipo de terreno tiene una alta permeabilidad lo que lo hace propicio para absorber bien el agua y retener la humedad en niveles muy bajos. La particularidad que tiene la uva palomino, que es perfecta para vinos como la manzanilla de Sanlúcar, es que busca el agua incluso llegando a extender sus raíces hasta los 16 metros bajo tierra. Es decir, aunque en el exterior no haya ni gota de agua y haga mucho calor, la uva se busca la vida para estar bien hidratada.

La zona vinícola del Marco de Jerez, junto a Montilla-Moriles, es en la que se realiza primero la vendimia en España, que además se hace nocturna para evitar que el calor pueda fermentar la uva fuera de la bodega durante el transporte.

Al visitar Bodegas Barbadillo te das cuenta que las instalaciones son mucho más de lo que se cree. Barbadillo posee 16 bodegas en el casco histórico de Sanlúcar de Barrameda, otra en Somontano, en Barbastro, que es Bodega Pirineos, y otra en Ribera del Duero, llamada Bodegas y Viñedos Vega Real.

Bodegas en el centro de Sanlúcar

Antes de empezar a visitar Bodegas Barbadillo hay que comprender por qué está en pleno centro de Sanlúcar de Barrameda pese a que otras grandes bodegas como Osborne o González Byass cambiaron hace tiempo parte de sus instalaciones a localizaciones más alejadas del centro de Jerez o el Puerto Santa María con el objetivo de mejorar la logística. Esto lo hicieron porque el cambio de sitio no afectaba al vino.

Visitar Bodegas Barbadillo, ubicada en el centro de Sanlúcar

Sin embargo, la ubicación de Bodegas Barbadillo no se puede cambiar debido a que si la quitas de donde está, ya no se obtiene el mismo producto porque cambian las condiciones de reposo que le proporciona la exposición continua al viento de poniente.

La Manzanilla de Barbadillo

En el Barrio Bajo de Sanlúcar de Barrameda la manzanilla de Barbadillo comienza su proceso. Ahí es donde se deja reposar en las botas hasta que crea el velo de flor. Una vez ocurre esto, se llevan a las bodegas del Barrio Alto de Sanlúcar.

Manzanilla de Bodegas Barbadillo

En las bodegas del Barrio Alto las botas están muy expuestas al poniente y al viento que viene del Coto de Doñana, lo cual le proporciona unas características únicas que la convierten en manzanilla.

Diferencia entre fino y manzanilla

Llegados a este punto sería conveniente aclarar cuál es la diferencia entre el fino y la manzanilla, que es algo que mucha gente como yo se plantea en algún momento de la vida.

La diferencia entre una y otra está en su crianza, si orientas la bota al poniente sale manzanilla, pero si la orientas hacia otro sitio, sale fino.

Luego podemos descubrir que hay muchas más particularidades pero para los que nos iniciamos en el mundo del vino saber esto es un primer paso para entender mejor esta bebida.

Cuál es la diferencia entre el fino y la manzanilla

Como dato, en el primer trimestre de 2018 ha sido la primera vez en la historia que se ha vendido más manzanilla que fino en todo el mundo.

Tras esta introducción que nos sitúa en el contexto en el que se crean los vinos de esta marca, comenzamos a visitar Bodegas Barbadillo empezando por la joya de la corona, la bodega conocida como La Catedral.

Bodega la Arboledilla, La Catedral

Es una bodega de gran tamaño, tanto que el vino que sale de ella es distinto en cada punto de la bodega debido a sus grandes dimensiones.

Bodegas Barbadillo y su Bodega Catedral

En uno de sus extremos la bodega está abierta al poniente mediante un gran rosetón sin cristal que permite la entrada de este aire, estando en el extremo opuesto tapados sus ventanales con persianas de esparto. Esto permite una magnífica ventilación de la bodega.

Bodega Arboledilla

Aquí pudimos asistir a la explicación de cómo se crea el velo de flor y la madre en el fondo de la bota, que es lo que da cuerpo a la manzanilla. Es decir, cuanto más antigüedad de la bota, más madre, y esto hace que el vino sea mejor.

La Catedral, la bodega más grande de Barbadillo

También aprendimos en La Arboledilla el proceso del vino mediante el método de soleras y criaderas, pudiendo entender con estas explicaciones varias de las inscripciones hechas por los trabajadores sobre las botas.

Otras Bodegas menos conocidas de Barbadillo

Alrededor de La Catedral se encuentran otras bodegas que aunque son menos atractivas tienen una gran historia detrás además de mucha importancia en la producción total de los vinos de Barbadillo. Si vas a visitar Bodegas Barbadillo merece la pena verlas, por eso vamos a hacer un pequeño repaso de algunas de ellas:

  • Bodega «El Potro», es una bodega de tipología mudéjar que alberga en su interior 4.597 botas. Está destinada a la crianza de Amontillado, Oloroso, Pedro Ximénez y Moscatel, entre otros.

En Sanlúcar de Barrameda, Bodega El Potro

  • Bodega «Las Mil Pesetas», también de tipología mudéjar pero de menores dimensiones, ya que da cobijo a 92 botas en las que se cría la Manzanilla en Rama de Barbadillo.

Bodega Las Mil Pesetas en Sanlúcar

  • Bodega «Dos Hermanas», una más de tipología mudéjar, con 87 botas en su interior destinadas a la crianza de Amontillado.

Bodega Dos Hermanas de Barbadillo

Catando los vinos de Barbadillo

Visitar Bodegas Barbadillo no es solo conocer la historia de las distintas bodegas de la marca, sino también hay un tiempo dedicado al conocimiento de sus vinos. Por eso, nos desplazamos hacia el aula de cata de Bodegas Barbadillo conocida como «Aula de Cata Toto Barbadillo». Allí realizaríamos la cata guiada de cinco vinos de Barbadillo:

  • Castillo de San Diego
  • Blanco de Blancos
  • Manzanilla Solear
  • Beta Sur Brut Nature
  • Quadis tinto

Como dije al principio, como no soy un erudito en la materia pero me gusta mucho, presté toda la atención que pude para aprender lo máximo posible en la cata. El resultado fue el siguiente:

Castillo de San Diego

Es de color amarillo, brillante, con un olor que recuerda a frutas blancas. Es un vino muy agradable de tomar, con un ligero dulzor al principio. Ideal para tomar sobre todo con pescados y mariscos.

Blanco de Blancos

Es de un color amarillo algo más pálido que Castillo de San Diego, algo más ácido en boca y con un recuerdo a piña en nariz.

Catando vinos de Barbadillo en la bodega

Manzanilla Solear

Al tener una Crianza de 6 años en varias bodegas, cuando lo movemos en la copa vemos cómo deja más lagrima debido a su edad. A lo mejor pensáis que estoy flipado con lo que voy a decir ahora, pero su olor me recuerda a mi infancia en Tarifa, el segundo día de poniente cuando de frente al mar ves las algas aún frescas que se mantienen sobre las olas pero sin llegar a la orilla. A eso concretamente me recuerda el olor de Manzanilla Solear. A mar con viento de poniente.

Teniendo en cuenta que se ha criado durante 6 años en botas orientadas al poniente igual no suena tan disparatado lo que estoy diciendo…

Beta Sur Brut Nature

En nariz recuerda a frutas cítricas y algo de bollería, siendo a la vista de un amarillo brillante adornado con sus constantes burbujas. En boca recuerda a fruta blanca como la manzana. Sin duda una buena alternativa para tomar espumosos. Os dejo más información sobre este Brut en la web Elbrutdelsur.com

Quadis Crianza

En nariz recuerda a olor a pimientos picantes y a madera tostada. Es un tinto de color morado, algo más oscuro que un joven gracias a sus 11 meses de reposo en madera. Como detalle para los no avanzados (como yo), si el color del tinto es más tirando a color caldera, quiere decir que es de mayor edad. Más sobre este vino en Quadistinto.com

Bodega Casa de la Cilla

A continuación fuimos a la bodega llamada La Cilla, que es donde se recaudaban los diezmos antiguamente. Al comprarlo Barbadillo decidió conservarlo por su belleza en vez de convertirlo totalmente en bodega, que era la idea inicial. Esto lo decidió Manuel Barbadillo, el bodeguero poeta.

Busto de Manuel Barbadillo

Es una bodega en cuadro con el objetivo de que circule bien el aire entre ellas, con un patio central muy bonito dedicado a Manuel Barbadillo, muy cercano a la generación del 27, a la que no perteneció por no mudarse a Madrid. Todos los integrantes de dicha Generación vinieron a verlo y dejaron de alguna forma constancia de su paso por Bodegas Barbadillo.

Versos 1891, el vino más exclusivo de Barbadillo

El padre de Manuel, a cada hijo le regaló una bota de vino, y para Manuel barbadillo fue una que contenía amontillado. Más de un siglo después, Bodegas Barbadillo lanzó al mercado una producción limitada de tan solo 100 unidades de este vino valoradas cada una en 10.000€. Este vino se conoce como Versos 1891.

Calquier cosa que diga sería poco para intentar explicar el mundo en torno a este vino, por eso lo mejor que puedo hacer es poner este gran vídeo que resume perfectamente qué es Versos 1891:

También en el interior de La Cilla hay una venta de los años 40 que surgió como temporal pero que es bonita de ver por su decoración en azulejos de la época. A través de ella se puede acceder a oficinas y salas de junta, así como al antiguo despacho de Manuel Barbadillo, que está tal cual lo tenía en su día.

Manuel Barbadillo, el Bodeguero Poeta

Bodega La Sacristía, donde se guardan las joyas

En esta zona de la bodega es donde se guardan bajo llave los vinos de Barbadillo con más de 95 puntos Parker y que además tienen más de 100 años de antigüedad. Joyas enológicas que son visitadas en contadas ocasiones, normalmente por personalidades. La foto siguiente está tomada desde detrás de la reja que los guarda.

Los vinos más antiguos y valorados de Barbadillo

La Bodega del Toro, de las más antiguas de Barbadillo

Esta bodega es un recinto que a su vez se compone de varias bodegas, las cuales forman El Toro. Se trata de las llamadas bodegas Trinidad, Santiago y La Pastora.

En Barbadillo está la Bodega Del Toro

Estas tres bodegas se sitúan en torno a un patio central lo que permite la correcta circulación del aire entre ellas. Este era el método más utilizado antiguamente pero con el descubrimiento de otros más efectivos cayó en desuso a la hora de construir nuevas bodegas.

Patio de la Bodega del Toro

Bodega Don Benigno, una bodega muy pintoresca

Por último antes de almorzar fuimos a la Bodega Don Benigno, que tiene una gran particularidad ya que en sus botas hay dibujados animales del Coto y además es donde se ubican las botas de la Orden de la Solear.

Botas de vino con dibujos de animales

En su planta alta, se encuentra habilitado el espacio donde se hace entrega de la distinción que acredita a los integrantes de la Orden de la Solear como tales. Allí se hace un pequeño evento que suele aparecer en los medios de comunicación por el interés que genera. Como señal de su pertenencia a la Orden de la Solear, firman su agradecimiento en una de las botas de las que se reservan para ello.

En Barbadillo, Orden de la Solear

Tienda de vinos de Barbadillo

Si vas a visitar Bodegas Barbadillo entrar en la tienda antes de salir es algo casi obligatorio porque siempre hay algo que nos puede interesar. Nosotros para finalizar la visita hicimos una parada en la Tienda de Barbadillo, de la que me llevé a casa varios vinos que aún no había probado y que próximamente veremos su cata en el Blog de Recomendación de Vinos que regento.

Comprar vinos de Barbadillo en la bodega

Estos vinos fueron, en cuanto a tintos, Nude Tintilla de Barbadillo y 3404 de Bodega Pirineos. En el apartado de blancos me llevé una botella de Impás, de la línea de Alta Enología de Barbadillo. Y como complemento, dos botellas del vermut Atamán, también de la línea de Alta Enología.

Almorzar en Sanlúcar de Barrameda

El lugar concertado para el almuerzo tras visitar Bodegas Barbadillo fue el Restaurante Poma en Bajo de Guía. Es un establecimiento con una situación muy especial, ya que desde su planta alta se puede ver el Coto de Doñana al otro lado de la desembocadura del río Guadalquivir.

Restaurante Poma frente al Coto de Doñana

Es todo un gustazo poder almorzar con la brisa marinera dándote en la cara, pero lo más importante no es eso, lo mejor del asunto es lo bueno que está todo en este sitio.

Langostinos de Sanlúcar, un clásico

Comenzamos con los clásicos langostinos de Sanlúcar, que según nos contaron son los mismos empleados del restaurante, que tiene una pequeña embarcación, quienes los capturan para ponerlos en el día. Están buenísimos, los mejores que he probado hasta ahora. Esto lo maridamos con Castillo de San Diego, vino de Barbadillo que le va bordado.

Comer Langostinos en Sanlúcar

De segundo, y aquí empezamos a maridar con Blanco de Blancos, también de Barbadillo, unas coquinas muy fresquitas con una salsa que nos encantó a todos. Ideal para que fuera menguando el pan que había en la mesa.

Comer coquinas en Sanlúcar

Lo siguiente fue un plato de langostinos con huevo y tomate que estaba para chuparse los dedos, literalmente. Tanto el sólido como la salsa. Esto ya le dio el remate al pan, qué rico que estaba todo…

Plato de Huevo con langostinos en salsa de tomate

Por último, para poner a prueba la capacidad del estómago, un plato de arroz caldoso que aunque ya estábamos llenos nos acabamos sin rechistar. Espectacular.

Plato de arroz caldoso en el Restaurante Poma

Como cierre a este magnífico almuerzo unos tocinillos para compartir con un cafelito. Tras esto, emprendimos la vuelta a Sevilla deseando de volver a visitar una bodega. Sin duda merece la pena visitar Bodegas Barbadillo, si tenéis ocasión no lo dejéis pasar.

Como cierre, aprovecho la ocasión y la temática para invitaros a conocer «De Bodegas Por España/ Spain Through Its Wineries» , una iniciativa que tiene como objetivo fomentar el enoturismo en España a través de experiencias enoturísticas que ponen en valor este tipo de patrimonio.

¡Un saludo!

2 Comments on “Experiencias: Visitar Bodegas Barbadillo en Sanlúcar de Barrameda”

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