A mitad del mes de agosto en Sevilla no hay mucho que hacer más allá que ir al trabajo y pasar calor. Entre tanto ajetreo decidimos tomarnos un respiro e irnos a uno de los principales baños árabes de Sevilla, que tiene por nombre oficial «Aire de Sevilla« y se encuentra en pleno centro de la ciudad, en la calle Aire (el nombre le viene bordado, ¿verdad?).

Tuvimos la suerte de vivir y poder contar en el blog una nueva experiencia más gracias a un regalo que nos hicieron de un pack para dos que fuimos posponiendo disfrutar durante dos años hasta que llegó el día. ¿Dónde mejor se puede estar que en una piscina en verano?

Varias experiencias en los baños árabes de Sevilla

En estos baños tienen diferentes experiencias pero la que teníamos nosotros en este caso fue el baño termal con un masaje de 15 minutos. Como dentro no se pueden tomar fotos vamos a poner solamente una del patio en el que esperas a que te llamen, y además no es muy buena porque había gente esperando y no era plan de sacarlos sin permiso. Aún así, vamos a explicar cómo es el proceso para que os podáis hacer una idea.

¿Cuánto cuesta ir a los baños árabes de Sevilla?

El precio de esta experiencia en los baños árabes de Sevilla es, por persona, de 54€ entre semana y de 59€ los fines de semana. Por suerte fue un regalo…

Hay que llamar previamente para reservar, y en nuestro caso nosotros hicimos la reserva para las 21:00. En total pasamos dentro casi dos horas. Hay que estar un poco antes para que te reciban y te puedan explicar en dónde debes dejar tus cosas y que te den todo el equipo necesario para el baño, que incluye albornoz, zapatillas antideslizantes y toalla.

Dentro de los vestuarios tienen unas taquillas para que puedas guardar tus pertenencias con un código que tú mismo pones. Leímos en la web que se debe ir con el pelo recogido y al llegar a los baños mucha gente estaba con el pelo suelto y, por consiguiente, te encuentras con más de un pelo largo pululando por el agua de las distintas piscinas.

Las salas de los baños árabes de Sevilla

Te llevan hacia una primera sala principal que es donde te puedes sentar tranquilamente a tomar té o agua con limón entre baño y baño, todas las veces que quieras.

Sala de contrastes

Una de las salas es la de contrastes, con frigidrium, tepidarium y caldarium. Es decir, una piscina con agua fría, otra templada y otra muy caliente. Empiezas en la templada y luego lo suyo es ir a la caliente para finalizar en la fría cortándote el cuerpo. Nosotros hicimos templado, frío y caliente, ya que en la caliente había overbooking en ese momento y tuvimos que esperar.

Sala del jacuzzi

En la siguiente sala nos encontramos el balneum, que es una piscina tipo jacuzzi. Ahí hay sitio para todos, con sitios más individuales y privados para que te des un baño de burbujas y otras zonas más comunes en las que las burbujas se mezclan desde un «burbujeador» y otro.

Sala de la sauna

Para los que os guste la sauna también disponen de laconicum, que es una sala inundada de vapor en la que se respira eucalipto. El golpe de calor al entrar es fuerte, parece que te van a hervir las fosas nasales y los ojos, pero te vas acostumbrando, respiras hondo para dilatar pulmones y a sudar. La sauna está ubicada junto a una sala en la que hacen vinoterapia, que suponemos que serán masajes con vino o algo similar, pero como no estaba dentro de nuestra experiencia no lo podíamos saber.

Sala del flotarium

Abajo está el flotarium, que consiste en una piscina con mucha sal para que flotes un ratito y te relajes. Hay una especie de plato gigante con sal que puedes usar para exfoliarte mientras tanto, es una sal muy suave que va cayendo a la piscina mientras te exfolias.

El masaje de los baños árabes de Sevilla

Cuando llevas más o menos una hora y media en los distintos baños, a los cuáles puedes ir accediendo libremente, alguien del personal te busca para llevarte a la zona de masajes. Dicho masaje se realiza en pies, piernas (aquí insisten demasiado), brazos y espalda.

A uno de nosotros nos dijo la masajista que le avisaramos si presionaba demasiado pero al otro no… y esto provocó volver a casa con varios dolores.

Pros y contras de los baños árabes de Sevilla

Vamos a empezar por los contras de los baños árabes de Sevilla. Se podría decir que entre el calor que hace dentro y la paliza recibida en el masaje, igual se te quitan un poco las ganas de volver en un tiempo.

Por el contrario, como pros, un punto a favor y en común de todas las salas de las instalaciones de los baños árabes de Sevilla es la luz tenue que hay en todas las estancias, invitando al silencio y a la relajación.

Para las personas a las que les guste relajarse en el agua, la tranquilidad, el silencio y un masajito en un lugar diferente, les animamos a que prueben estos baños árabes, merece la pena vivir la experiencia al menos una vez en la vida.