El pueblo de Horche está situado cerca de Guadalajara, en Castilla-La Mancha. Hasta allí llegamos como punto intermedio en un periplo desde Sevilla hasta Navarra, con idea de hacer una parada técnica y no hacer tantos kilómetros de golpe.

Horche no es muy grande, tiene unos 2500 habitantes, y se ubica en la comarca de La Alcarria. La realidad es que no nos dio mucho tiempo a conocerlo en profundidad, pero sí podemos aconsejar en este artículo el lugar en el que nos alojamos y donde fuimos a cenar tras dar un breve paseo por sus calles.

Dónde dormir en Horche

Para alojarnos cogimos una oferta en el Hotel La Fuensanta que incluía desayuno. Nos salió por 52€ y elegimos este sitio porque tenía piscina, algo que en pleno verano a primera hora de la tarde nos iba a venir muy bien.

Es un hotel restaurante rural situado cerca de Horche, en mitad del monte, con unas amplias instalaciones y todo muy bien preparado. Nos recibieron con agrado y podemos decir que todo estaba correcto.

Nada más llegar nos cambiamos rápido y nos fuimos para la piscina, aprovechando el tiempo de sol que nos quedaba. Allí en las tumbonas fuimos planeando el plan del siguiente día, con tranquilidad.

Dónde cenar en Horche

Tras la tarde de piscineo nos fuimos hacia el pueblo, que está a 2 kilómetros del alojamiento. Fuimos directamente a la plaza del Ayuntamiento que según Google es donde más bares había, de modo que pudiésemos tener opciones.

Como estaba todo lleno, comenzamos a andar y recorrimos algunas de sus calles, hasta que volvimos a la misma plaza porque alejándose de alí poco había.

Nos sentamos finalmente en el Bar El Rincón de Adryd, un bar que se adentraba en la calle de la Iglesia pero que tenía mesas en la plaza del Ayuntamiento.

Con idea de ser moderados, decidimos pedir dos platos en vez de tres, pero la realidad es que nada de moderación: cachopo y torreznos, acompañados por cerveza y vermut. Todo por 26€.

Como se puede ver en las fotos, el tamaño de ambas cosas no era pequeño, ni tampoco su poder calórico. El cachopo estaba bueno, como es costumbre en este plato, pero los torreznos… nos hubiésemos comido un kilo. ¡Estaban tremendos! Muy recomendado este plato si vas a visitar Horche.

Tras la copiosa cena dimos un breve paseo por las calles de Horche para ir acomodando los torreznos, hasta que llegamos al coche y despacito nos fuimos de vuelta.

Desayunar en Horche

Nos despertamos con el sonido de los pájaros, que eso sí, al estar en mitad de la naturaleza escuchas a toda la fauna desde tempranito. Recogimos un poco las cosas y bajamos para tomar el desayuno, que estaba incluido en el precio de la habitación.

El desayuno consistía en tostada con aceite y tomate, un zumo de naranja y un café. Como se puede ver en la foto, estaba muy bien. Además, al acabar nos preguntó el camarero que si queríamos otra tostada, pero con una ya íbamos bien servidos hasta la hora del almuerzo, que sería en el pueblo Navarro de Puente La Reina.